De acuerdo con el estudio “Desafíos de contratación 2025”, elaborado por la firma de reclutamiento Robert Walters, que encuestó a responsables de selección en Chile y otros países de la región, en un mercado laboral tensionado por el bajo crecimiento económico y una tasa de desempleo que bordea el 8,9% (INE.cl), la resiliencia se posiciona como la habilidad más valorada por los equipos de Recursos Humanos.
El informe revela que para el 78% de los tomadores de decisión, la resiliencia es más relevante que cualquier habilidad técnica al momento de contratar. Sin embargo, un 72% admite no haber considerado esta dimensión en sus evaluaciones, para posteriormente arrepentirse.
“La presión por mantener el desempeño organizacional en un entorno desafiante ha llevado a muchas empresas a revisar sus criterios de selección. Hoy se prioriza a quienes sean capaces de adaptarse, sostener resultados y aportar desde el primer día, más allá de lo técnico”, señala Rebeca Márquez, Senior Manager de Robert Walters Chile.
Según el estudio, habilidades como la introspección, la inteligencia emocional y la adaptabilidad están ganando terreno en los procesos de selección. Para un 67% de los encuestados la capacidad de autoconocimiento —fundamental para reconocer fortalezas, debilidades y estilo de liderazgo— es clave en un entorno cambiante.
Respecto al impacto organizacional, datos del reporte indican que los trabajadores con mayor introspección tienen un 43% más de probabilidad de pedir retroalimentación constructiva y un 30% más de capacidad para adaptarse a diversos equipos o condiciones laborales.
Esta nueva forma de establecer prioridades también está transformando las entrevistas laborales. Las interrogantes convencionales están siendo reemplazadas por situaciones diseñadas para descubrir cómo responde una persona frente a problemas, estrés o labores inusuales.
Como explica Márquez, “cursos de Excel o herramientas digitales se pueden enseñar. Pero formar resiliencia, capacidad de gestión emocional o liderazgo empático requiere tiempo y condiciones que no todas las compañías pueden ofrecer en el corto plazo”.
La inclinación muestra una transformación fundamental en las tácticas de gestión de talento: en un entorno donde la eficiencia y la seguridad dentro de la organización son cruciales, las compañías buscan individuos que posean la resiliencia emocional requerida para afrontar lo desconocido.