medicina y tecnología

La nube y la IA están transformando el diagnóstico y la atención médica



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Desde diagnósticos más rápidos y precisos hasta hospitales conectados en tiempo real, la integración de nuevas tecnologías está redefiniendo el modo en que se gestiona la salud.

Publicado el 17 nov 2025



Sector salud

La inteligencia artificial y la computación en la nube están cambiando el futuro en el sector salud. Con el uso de estas tecnologías, los diagnósticos en medicina están siendo más veloces, exactos y accesibles, lo que hace posible que procedimientos que antes podían demorar horas o días se completen en solo minutos. Este cambio representa un hito en cómo los expertos examinan, comprenden y distribuyen información esencial para la atención al paciente.

Actualmente, soluciones basadas en IA pueden revisar radiografías, tomografías o resonancias con un nivel de exactitud sin precedentes, identificando patrones y notificando sobre posibles irregularidades, mientras que la nube facilita que esos hallazgos se analicen y se distribuyan de inmediato, desde cualquier ubicación, con una conexión segura y adaptable.

“La convergencia entre la nube y la inteligencia artificial está permitiendo que la medicina sea más predictiva, colaborativa y accesible. Ahora, con el lanzamiento de modelos de IA on-premise, como Velvet 25B que presentamos desde TIVIT —compañía que forma parte del grupo tecnológico italiano Almaviva—, estas capacidades se amplían significativamente. Gracias a ello, es posible analizar un mayor volumen de datos para generar información más relevante para los médicos, sus asistentes o las áreas clínicas y administrativas, garantizando al mismo tiempo la protección de los datos personales y el anonimato de los pacientes y sus diagnósticos”, explicó Pablo Prieto, Director de Digital Business de TIVIT Latam.

Uno de los principales beneficios de esta evolución es lograr que el acceso a la medicina especializada sea más igualitario. Con la ayuda de la infraestructura en la nube, hospitales y centros de salud en áreas remotas pueden utilizar las mismas herramientas de diagnóstico que las grandes clínicas en zonas urbanas, lo que facilita una atención más equitativa y oportuna.

De acuerdo con estimaciones de Markets and Markets, el sector mundial de inteligencia artificial en el sector salud llegará a los US$ 208 mil millones en el año 2030, impulsado por la implementación de tecnologías basadas en la nube, la evaluación de imágenes médicas y la automatización de procesos clínicos. Además, más del 60% de los trabajadores de la salud ya emplea alguna herramienta que utiliza inteligencia artificial para labores de diagnóstico o análisis de información, según datos proporcionados por Demandsage.

Esto se traduce en reducción de tiempos de respuesta ante urgencias, identificación temprana de patologías y mejora en la precisión diagnóstica. En especialidades como radiología o cardiología, la IA y la nube se han posicionado como aliados clave para administrar grandes volúmenes de información clínica de manera rápida y segura.

Asimismo, el desarrollo de estas tecnologías ya se manifiesta en datos específicos. Según TIVIT, hay aparatos que presentan un valor predictivo negativo (NPV) del 99,97%, los cuales pueden descartar hasta 75 detalles diferentes en una radiografía de tórax con ese grado de confiabilidad. Son instrumentos médicos validados y empleados en la práctica clínica, que proporcionan diagnósticos seguros y apoyan la toma de decisiones clínicas con altos niveles de exactitud.

Sin embargo, su ejecución presenta desafíos adicionales: el resguardo de información, la base digital y la formación del personal sanitario son elementos cruciales para una adopción ética y duradera. Además, los sistemas normativos deben ajustarse al ritmo de los avances, asegurando que la tecnología progrese sin poner en riesgo la privacidad o la seguridad del paciente.

En una época en que la necesidad de atención médica aumenta y el personal disponible es escaso, la combinación de la computación en la nube y la inteligencia artificial está no solo mejorando los diagnósticos clínicos, sino que también está estableciendo las bases para un sector salud más eficiente, interconectado y orientado al paciente.

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